Ekrem İmamoğlu: "Turquía ha entrado en una nueva era de 'Lo que tocas, arde'. Vemos que el poder que proviene de la ley está siendo abusado muy abiertamente y que se están haciendo intentos de infundir miedo en todos los segmentos de la sociedad. No tendremos miedo y no nos quedaremos callados. ¡No tengas miedo y no calles! La detención de los periodistas Barış Pehlivan y Serhan Asker es una práctica vergonzosa. Nos encontramos en una situación extraña en la que la injusticia se ha convertido en una práctica ordinaria del poder, en la que ni siquiera es objeto de examen por parte de un testigo experto, sino que informar sobre la injusticia y la ilegalidad se ha convertido en un delito. Llegarán las urnas y todo habrá terminado".
